Más de tres lustros ha vivido Pablo Regis en Integralia, un viaje que comenzó lleno de nervios e ilusión.
El protagonista del viaje de hoy es Pablo Regis Fonseca (Pamplona, 1975), quien se formó en las aulas de la UPNA e hizo parada en Integralia hace 16 años. El hoy encargado de producción de Integralia, imagina la movilidad del futuro con “vehículos sin ruedas, conducidos por robots”. Mientras tanto, él es responsable de planificar, controlar y revisar la fabricación de todos los vehículos que salen de la carrocera navarra, pero lo que más valora este pamplonés es el trato humano de los compañeros.
¿Cómo empezó tu trabajo en Integralia?
Empecé dedicándome al almacén, pero soy inquieto y curioso, por lo que quería hacer labores más especializadas, así que siempre me ofrecía para hacer trabajos de soldadura o mecánica por lo que fui creciendo hasta llegar a mi actual puesto.
¿Algún día de trabajo en el recuerdo?
Sin duda, cualquiera de las jornadas previas a un evento son siempre un cúmulo de anécdotas, esos momentos nos han dado siempre situaciones muy inesperadas.
¿Cómo trabajáis cada proyecto en Integralia?
Desde mi punto de vista, lo complicado es llegar al cien por cien de la definición de un proyecto. En el proceso intervienen muchas personas y en cada cabeza se interpreta una idea de una manera, pero en Integralia siempre logramos aterrizar nuestros proyectos para lograr unos productos de calidad y sin comparativa en el mercado.
¿Cuál ha sido el proyecto más complicado?
El modelo ONE, considero que es un vehículo muy diferente a lo que el equipo estaba acostumbrado a realizar. Por supuesto, el esfuerzo por sacarlo adelante con todas las complicaciones que ha llevado ha merecido la pena cuando hemos visto el resultado final. Personalmente, sin dudarlo, creo que es el proyecto del que más orgulloso me siento.
¿Se aprende algo de que las cosas salgan mal?
Por supuesto, entre mis virtudes me gusta siempre reflexionar y sacar el lado positivo de todo. De los errores siempre se aprende: ensayo y error es la forma de avanzar. Si no aciertas, debes buscar una alternativa.
¿Cómo afrontas el riesgo de que los proyectos de innovación fallen?
Normalmente conseguimos que todos lleguen a su fin. Tenemos un gran equipo que consigue salvar los escollos que van apareciendo por el camino y poner en marcha proyectos que sobre el papel y, de primeras, asustan.
¿Cuáles son las responsabilidades que más te gustan en tu día a día?
Planificar e ir tomando decisiones para alcanzar los objetivos que la compañía haya marcado. Me gusta ver la evolución de un proyecto, siempre que sea para bien porque detesto equivocarme, aunque el error conlleve algún aprendizaje.
¿Cuál ha sido tu trabajo más raro?
Durante mi época de estudiante, compatibilicé mis estudios con un trabajo durante varios años en la pirotecnia de Esquiroz, donde recuerdo habían actualizado las máquinas, pero no el trabajo.
DE TÚ A TÚ CON PABLO REGIS
¿Asiento favorito del minibús?
Cualquiera de la parte trasera, normalmente hay menos gente y puedes viajar más tranquilo.
¿Qué película escogerías para la ruta?
Gladiator.
¿En qué te entretienes durante el viaje?
Mirando el paisaje.
¿Te mareas?
No, en un vehículo de carretera nunca me he sentido mal, pero sí me ha ocurrido alguna vez en un barco.
¿Algún destino pendiente de visitar?
México, me llama muchísimo la atención su cultura, sus tradiciones y las diferencias entre diferentes lugares de un mismo país.
¿Qué haces en tu tiempo libre?
Ahora mismo me encanta hacer planes con amigos, sobre todo para ir al monte a hacer senderismo. También disfruto mucho del cine y del deporte, sobre todo cuando juega Osasuna.
¿Una receta?
Gorrín asado a la manteca de cerdo,
¿Con qué lo maridas?
Con un vino tinto crianza navarro.
¿De postre?
Un gin tonic para digerir la grasa del gorrín.
¿Qué te gustaría inventar?
Una máquina del tiempo. Me enfurece que a veces los recuerdos se esfumen, incluso que sea nuestra propia memoria la que no refleje la realidad. Me encantaría retroceder en el tiempo para ver qué pasó realmente.
¿Qué serie has visto últimamente?
Gambito de Dama, me enganchó desde el principio con esas partidas de ajedrez que parecen no terminar nunca.
¿Algún libro que te haya ha marcado?
‘El mundo de Sofia’, me enseñó a ver las cosas desde diferentes prismas.
¿Qué es el confort?
Que mi cerebro esté cómodo.