El sistema de climatización del vehículo es fundamental para poder dar un servicio confortable. Revisarlo durante unos minutos cada 50.000 km o cada 6 meses puede evitar algunos problemas.
La subida de temperaturas de cara a primavera conlleva la puesta a punto del sistema de aire acondicionado. Durante esta época del año, este sistema se convierte en un imprescindible en la mayoría de los desplazamientos en minibús. La temperatura interior del vehículo es vital para que los pasajeros puedan realizar el viaje de manera confortable.
Integralia facilita al máximo la realización del mantenimiento a los propietarios de sus minibuses. Para ello, incluye en el IBBC los pasos a seguir para revisar cada uno de los sistemas que conforman la carrocería del minibús. La compañía recomienda realizarlos cada 50.000 km o cada 6 meses, con el fin de evitar sorpresas.
El sistema de aire acondicionado toma aire del exterior del vehículo y lo introduce en el interior del habitáculo de manera constante a la temperatura estimada que haya seleccionado el conductor del minibús y en la cantidad elegida. Un proceso sencillo, que si se descuida puede conllevar tener que reparar el sistema para poder realizar los servicios con un minibus.
Mantenimiento del compresor
Antes de nada, se debe comprobar el compresor. Primero alinear y retensar la correa, después, revisar la tornillería, el plato y los rodillos. En toda la instalación el responsable de la revisión debe verificar que los aislamientos y las válvulas estén correctamente.
Sistema de refrigeración
El segundo punto es el sistema de refrigeración. Hay que verificar los niveles de líquido y vigilar posibles fugas. Comprobar el estado del filtro y sustituirlo cada dos años. El siguiente elemento es la instalación eléctrica y los mandos. Comprobar las turbinas, los ventiladores, el Front Box, la activación de la trampilla y que el mando haga que todo funcione.
Equipo de techo
Después le toca el turno al equipo de techo: lo primero que se debe verificar es que no tenga ninguna entrada de agua de lluvia. A continuación, se deben sustituir, si es necesario, los filtros. Es decir, revisar el estado del aislante térmico y comprobar el correcto drenaje del agua de condensación. Limpiar las baterías, los condensadores, verificar las presiones, la tornillería y los electroventiladores. Para terminar con el mantenimiento del sistema de aire acondicionado, se debe analizar el estado de las presiones con el vehículo arrancado y después caliente.
¿En resumen? En el tiempo que dura el capítulo de una serie, poco más de 50 minutos, se puede comprobar la treintena de puntos que componen el sistema de aire acondicionado de un vehículo. Ese análisis puede evitar sustos innecesarios en el momento en el que los minibuses se ponen en la carretera después del invierno. Además, esta revisión la puede realizar cualquier persona sin experiencia, no hace falta ser profesional o tener conocimientos de mecánica, tan solo se deben seguir los pasos marcados en el manual que Integralia incorpora en el IBBC del propio minibús. Y, por supuesto, ante cualquier duda, el departamento de atención al cliente de Integralia siempre está disponible para alargar al máximo la vida de la carrocería del vehículo.